Santa Inés, comentario de Plinio Correa de Oliveira sobre el Santo del Día, 21 de enero

El Santo del Día

Santa Ines, Enero 21

Prof. Plinio Corrêa de Oliveira

Selección biográfica de San Ambrosio, Sobre las vírgenes , Libro II:

San Ambrosio habla con gran admiración de santa Inés, que fue martirizada a la tierna edad de 12 años. En su obra, Sobre las vírgenes, escribió: “¡Este es un nuevo tipo de martirio! Uno que todavía no tiene la edad adecuada para el castigo, pero que ya está listo para la victoria. Uno no preparado para el combate, pero capaz de ganar la corona. Alguien que aún no ha alcanzado la edad del juicio pero que ha dominado la virtud....

Nuestra Señora y el Niño Jesús con Santa Inés, izquierda y Santa Clara, derecha

“Con alegría avanza con paso sin vacilaciones hacia el lugar del castigo, su cabeza no adornada con trenzas, sino con Cristo. Todos lloran; ella sola está sin una lágrima. Todos se maravillan de que esté tan dispuesta a entregar su vida, que aún no ha disfrutado, pero que ahora renuncia como si la hubiera vivido plenamente. ¡Todos están asombrados de que ella se presente como testigo de Dios, aunque a su edad aún no podía decidir sobre sí misma!

“Y así sucedió que se creyó lo que ella dijo acerca de Dios, aunque lo que ella dijo acerca del hombre no sería aceptado. Porque lo que está más allá de la naturaleza es del Autor de la naturaleza...

“Se pone de pie, reza, se inclina hacia abajo. Se ve temblar al verdugo, como si él mismo hubiera sido condenado. Su mano derecha está temblando, su rostro se pone pálido. Teme el peligro de otro, mientras que la doncella no teme por su propio peligro.

"Tienes entonces en una víctima un doble martirio, de castidad y religión. Ella permaneció virgen y obtuvo el martirio".

Comentarios del Prof. Plinio:

El comentario de San Ambrosio sobre Santa Inés tiene un valor literario que es a la vez profundo y muy hermoso porque está compuesto de contrastes. Mediante el uso de estos contrastes, San Ambrosio muestra los puntos que quiere enfatizar.

Primero , está el contraste entre su edad y el martirio. Es demasiado joven para ser condenada a muerte porque a una edad tan joven nadie puede merecer tal castigo. Y, sin embargo, ya está lista para la victoria. El que no tiene la madurez en años, no obstante, está listo para ganar la victoria. Es una gloria. La inmadurez de los años y la madurez de la virtud.

El segundo contraste: No está lista para el combate, pero está lista para la corona. Una joven en ese momento no tenía condiciones para luchar, sin embargo, ganó el más alto de todos los laureles, que es la corona del martirio.

La muerte de santa Inés fue una síntesis
de contrastes armónicos

El tercer contraste: Ella es tan joven que todavía está bajo la tutela de otros. La ley no la considera capaz de gobernarse a sí misma. Todos los presentes la admiraban porque era testigo de la Deidad, aunque todavía era una menor de edad que no podía ser testigo de nada en un tribunal de derecho humano. Su palabra no tendría ningún valor en un proceso legal normal, sin embargo, ha impresionado a todos con su defensa de Nuestro Señor.

Además de esto, están los contrastes que se pueden encontrar en el martirio actual. Avanza alegre, sin vacilar, hacia el lugar del que naturalmente huyen todas las personas.

Otro contraste: su adorno no son trenzas trenzadas artificialmente, sino Jesucristo, porque Él es el verdadero adorno, la verdadera belleza del alma que se consagra a Él.

Otro contraste: no está coronada con coronas de flores como las otras jóvenes romanas de su tiempo, sino con pureza. Esa pureza en ella es esplendorosa y forma una especie de halo alrededor de su cabeza.

Todavía hay otros contrastes. Todos lloran al ver a una joven que será asesinada. Pero ella no. Es un contraste glorioso, porque ella está sedienta del cielo y no de la tierra. En ese sentido, todos están asombrados de que ella pueda renunciar tan fácilmente a una vida que apenas ha comenzado. Sin embargo, sacrifica esta vida como si ya la hubiera vivido y disfrutado plenamente.

¿Y cuál es el motivo de todos estos contrastes? Es porque San Ambrosio está tratando de enfatizar que hay algo absurdo en su martirio. Porque sería natural para ella hacer todo lo contrario de lo que está haciendo. La razón por la que actúa como lo hace con una fuerza que está más allá de la naturaleza es porque tal fuerza solo puede provenir del Autor de la naturaleza misma. Lo que está más allá de la naturaleza es más que lo meramente natural. Lo que es más que naturaleza aquí es Aquel que es su autor. Dios se reveló en la santidad de santa Inés y en el milagro de su muerte.

Ella avanza e inclina la cabeza. Ve al verdugo temblar como si fuera el condenado. Pero ella, la condenada, está tranquila y firme.

Su mano derecha está temblando, su rostro está pálido. Teme el peligro de otro, mientras que la doncella no teme por su propio peligro. El verdugo tiembla de miedo al usar las herramientas del castigo. Pero no le teme al verdugo.

Entonces tienes en una víctima un doble martirio, de castidad y religión. Ambos permanecieron virgen y obtuvo el martirio.

Este es el magnífico comentario de San Ambrosio sobre Santa Inés.


Prof. Plinio Corrêa de Oliveira

El Santo del día Las características más destacadas de la vida de los santos se basan en los comentarios realizados por el fallecido Prof. Plinio Corrêa de Oliveira. Siguiendo el ejemplo de San Juan Bosco, quien solía hacer charlas similares para los chicos de su colegio, cada tarde era la costumbre del profesor Plinio hacer un breve comentario sobre las vidas del santo del día siguiente en una reunión para jóvenes con el fin de alentarlos en la práctica de la virtud y el amor por la Iglesia Católica. TIA pensó que sus lectores podrían beneficiarse de estos valiosos comentarios.

Los textos de los datos biográficos y los comentarios provienen de notas personales tomadas por Atila S. Guimarães de 1964 a 1995. Dado que la fuente es un cuaderno personal, es posible que a veces las notas biográficas transcritas aquí no sean rigurosas siguiendo el texto original leído por el Prof. Plinio. Los comentarios también se han adaptado y traducido para el sitio de TIA.