Días de Fiesta de Nuestra Señora
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Lourdes y la Mediación Universal de María
- 11 de febrero
Ya que estamos en los días de la novena a Nuestra Señora de Lourdes, parece un buen momento para decir unas palabras sobre esta devoción.
Me parece que hay uno entre los muchos aspectos de la devoción a Lourdes que no ha sido suficientemente enfatizado. Sabéis que una verdad fundamental del Reino de María es la Mediación Universal de Nuestra Señora. El supuesto para que Nuestra Señora sea verdaderamente Reina es que sea capaz de hacer todo lo que quiera porque está en perfecta unión con Dios. Así es como ella gobierna el mundo.
Nuestra Señora – debido a su propia naturaleza humana como la nuestra – no tiene más poder sobre las estrellas o los hombres que nosotros. Entonces, para que ella tenga el reinado de todo el universo, sea la Reina de todos los Ángeles, Santos y hombres, la Reina de todo el mundo material además de ser el más terrible y completo dominio sobre el Diablo, necesita la gracia de Dios. Precisamente como punto de convergencia de todas las gracias de Dios, ella es Reina.
La omnipotencia de Nuestra Señora a menudo y muy apropiadamente ha sido llamada “omnipotencia del suplicante”, porque es a través de su súplica que Ella puede hacerlo todo. Porque puede obtener todo lo que pide de Nuestro Señor que es omnipotente, ella es Reina. Por tanto, el reinado de Nuestra Señora es el reinado de las súplicas que ella hace, del valor de las oraciones que ofrece.
La realeza de Nuestra Señora está íntimamente relacionada con el hecho de que ella es el canal de todas las gracias. Ella es Reina de todo porque a través de sus manos son concedidas todas las gracias que se dan a los hombres. Todas las peticiones que hacen los hombres se presentan a través de ella. Si todos los Santos y Ángeles del Cielo pidieran otra cosa y no pasaran por ella, no la obtendrían. ¡Solamente ella pidiendo, sin ninguno de ellos, obtiene ese favor! Por tanto, el foco de la predilección divina se concentra enteramente en ella. De ella parte a toda la Creación. Existe, por tanto, una especie de correlación íntima entre las dos realidades.
Por qué Dios quiso hacer milagros en Lourdes
La aparición de Lourdes a mediados del siglo XIX es la más famosa de una serie de otras, que culminan en Fátima en 1917 con la afirmación del Reino de María. En la densa oscuridad de nuestros días, la aparición de Lourdes es como una diana que anuncia que el Reino de María vendrá, constituye un toque de clarín del Reino de María.
Sería muy interesante estudiar en Lourdes la presencia de la idea de la Mediación Universal de las gracias y del Reino de María. Nuestro Señor podría haber dado esta estupenda fecundidad de milagros a uno de Sus santuarios, pero eligió hacerlo en Lourdes con la aparición de Nuestra Señora.
En Francia, por ejemplo, existe un magnífico santuario de Paray-le-Monial, donde Nuestro Señor hizo las revelaciones de Su Sagrado Corazón a Santa Margarita María de Alacoque. Fácilmente podría haber hecho que se produjeran allí muchas curaciones y milagros, y también en otros santuarios a Él consagrados.
Sin embargo, Él quería que la mayor fuente de milagros de la Historia ocurriera en un lugar que estaría dedicado a Nuestra Señora. En otras palabras, Él deseaba que todas esas curaciones se obtuvieran sólo bajo la égida de Nuestra Señora, después de una aparición de Nuestra Señora, como una gracia de Nuestra Señora y mediante una petición hecha a Nuestra Señora. En otras palabras, Él quería que todas estas estupendas curas pasaran por sus manos.
¿Y por qué? Evidentemente, para documentar la verdad de fe de su Mediación Universal, para que los hombres comprendan hasta qué punto Ella puede lograrlo todo. Las peores enfermedades, los mayores males, los sufrimientos más horribles, ella los cura. Ella toma las leyes más inflexibles de la naturaleza y las rechaza. ¡Ella lo conquista todo! A través de ella, una persona sin nervio óptico ve...
¡No se puede imaginar un dominio tan grande de Nuestra Señora sobre la naturaleza como éste! Todo esto se hace a través de Ella. ¿Por qué? Para mostrar que todas las gracias llegan por su intercesión. A su vez, la presencia de todas las gracias en sus manos para ser distribuidas significa que Ella es la Reina del Cielo y de la Tierra. Todo pasa por Ella.
Recuerdo una pequeña canción religiosa que se cantaba cuando yo era joven, cuando todavía había un resto de piedad en la sociedad, que decía: “¡Ave, oh Madre! Salve, oh Virgen Santísima, del universo portentoso y exquisito. Gloria más espléndida que la que tiene Tu único Dios, Señor del universo”. El canto es piadoso y la conclusión es sencilla: Nadie tiene gloria más espléndida que la Santísima Virgen excepto Dios, Señor del Universo.
Es decir, Nuestra Señora está infinitamente por debajo de Dios. Y todo lo que está debajo de Nuestra Señora está inmensamente debajo de Ella. Esto es lo que nos dicen las continuas curas de Lourdes.
Hay una cierta religiosidad volcada a pedir favores y gracias materiales, y que un tanto desdeña los favores espirituales. Estas almas quedan muy impresionadas por los favores materiales concedidos en Lourdes. Algunas personas no entienden que estos favores materiales que Dios da son, efectivamente, favores y que hay que pedirlos. Pero sólo son favores auténticos en la medida en que llevan al alma a desear favores espirituales, gracias para el alma. Aquí es donde Dios realmente atrae las almas hacia Él, porque todos los favores dados tienen este fin.
No penséis que una curación en Lourdes ocurre sólo porque Nuestra Señora se apiada, por ejemplo, del hombre cojo. Por supuesto que se apiada de ese pobre hombre y quiere aliviar su sufrimiento. Pero mucho más que esto, Nuestra Señora quiere hacer el bien a su alma, dando para este fin un milagro físico. Un milagro que beneficia también a quienes ven o oyen hablar de ese prodigio. En este caso, lo importante es tener mucha fe en la verdad de que Ella es la Mediadora de Todas las Gracias.
Digo esto porque recientemente tuvimos la bendición de las velas de San Blas. Vi esa masa de personas que van a la iglesia a recibir la bendición para protegerse de los dolores de garganta. Es claro que Nuestra Señora desea liberarnos del dolor de garganta en los casos en que esta dolencia no nos conduce a la salvación. Porque a veces un dolor de garganta, o una enfermedad aún peor, es muy bueno para un hombre. Si no hubiera enfermedades en la Tierra, el Infierno estaría mucho más lleno de lo que está; no sólo un poco más lleno, ¡sino mucho más lleno de lo que está! Por tanto, Nuestra Señora no cura todas las enfermedades.
Pero cuando cura, lo hace con placer y amor maternal. ¿Y por qué lo hace? Para que la gente sienta su bondad. Y estimular su deseo de curarse del mal, de las enfermedades del alma, y de adquirir sobre todo bienes espirituales.
Qué preguntar en la fiesta de Lourdes
Entonces, ¿qué debemos pedirle a Nuestra Señora de Lourdes en su fiesta que se acerca?
Dado que Nuestra Señora de Lourdes deseaba ser conocida allí, sugiero – y es sólo una sugerencia – que en vísperas de su fiesta, podamos pensar en una gran gracia para pedir a Nuestra Señora.
Debemos ser audaces en nuestras oraciones. Hay que pedir cosas audaces, pero no tontas. Deberíamos pedir gracias difíciles. Y, al mismo tiempo, debemos preguntar con insistencia. Quizás cada uno de nosotros podría tratar de discernir tanto una gracia espiritual como una gracia temporal que debe pedir en el día de su fiesta. Una gracia que concierne a la santificación y luego algo temporal que deseamos para el bien de nuestras almas.
Esto nos lleva a una reflexión sobre nuestras vidas. Nos lleva a elevar un poco el panorama de nuestra vida espiritual y, de este modo, a tener una visión más precisa de nosotros mismos, de nuestras actividades, de nuestro camino de vida, y a decir una oración de gratitud a la Virgen.
En la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús en la ciudad de São Paulo hay una cueva con una imagen de Nuestra Señora de Lourdes lo cual es inusual porque, si no me equivoco, era la imagen que antes se veneraba en la gruta de Lourdes. la imagen actual se colocó allí. Tiene, por tanto, un vínculo más directo entre Lourdes y nosotros.
Por esta razón, en las últimas horas de la tarde, allí se da la bendición de los enfermos, y muchas personas han afirmado que allí fueron curados. No se han realizado investigaciones, pero se dice que estas curaciones se han producido.
En vista de esto, nunca debemos olvidar que las enfermedades del cuerpo son tratadas en los Evangelios como símbolos de las enfermedades del alma. Y así como algunos padecen parálisis del cuerpo, otros padecen parálisis del alma; algunos padecen ceguera del cuerpo, otros del alma; lo mismo con la sordera, el mutismo, etc.
Si tenemos defectos del alma que quisiéramos corregir, este sería el momento adecuado para llevarlos a los pies de Nuestra Señora y pedirle que nos sane. Es una petición muy razonable, porque si Nuestra Señora tiene un deseo tan grande de sanar nuestros cuerpos mortales perecederos, ¡cuánto más querrá sanar nuestras almas imperecederas e inmortales!
Nuestro Señor Jesucristo no vino a la tierra para salvar cuerpos; Él vino a la tierra para salvar almas y por eso no puede sino complacerse en recibir nuestras peticiones. Preguntamos por nosotros mismos o por alguien que nos importa, alguien con quien estamos haciendo apostolado, por un alma cuyas pruebas nos asustan, por un amigo cuyas aflicciones o tentaciones y peligros son motivo de preocupación para nosotros.
Entonces debemos ir ante Nuestra Señora de Lourdes y hacerle esta petición; ésta es la sugerencia que quisiera hacerles durante esta novena que precede a la Fiesta de Nuestra Señora de Lourdes.
Nuestra Señora de Lourdes - 11 de febrero
Santa Bernadette Soubirous - 16 de abril
El Santo del día
Las características más destacadas de la vida de los santos se basan en los comentarios realizados por el fallecido Prof. Plinio Corrêa de Oliveira. Siguiendo el ejemplo de San Juan Bosco, quien solía hacer charlas similares para los chicos de su colegio, cada tarde era la costumbre del profesor Plinio hacer un breve comentario sobre las vidas del santo del día siguiente en una reunión para jóvenes con el fin de alentarlos en la práctica de la virtud y el amor por la Iglesia Católica. TIA pensó que sus lectores podrían beneficiarse de estos valiosos comentarios.
Los textos de los datos biográficos y los comentarios provienen de notas personales tomadas por Atila S. Guimarães de 1964 a 1995. Dado que la fuente es un cuaderno personal, es posible que a veces las notas biográficas transcritas aquí no sean rigurosas siga el texto original leído por el Prof. Plinio. Los comentarios también se han adaptado y traducido para el sitio de TIA.
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El sitio donde se apareció Nuestra Señora en Lourdes
Nuestra Señora – debido a su propia naturaleza humana como la nuestra – no tiene más poder sobre las estrellas o los hombres que nosotros. Entonces, para que ella tenga el reinado de todo el universo, sea la Reina de todos los Ángeles, Santos y hombres, la Reina de todo el mundo material además de ser el más terrible y completo dominio sobre el Diablo, necesita la gracia de Dios. Precisamente como punto de convergencia de todas las gracias de Dios, ella es Reina.
La omnipotencia de Nuestra Señora a menudo y muy apropiadamente ha sido llamada “omnipotencia del suplicante”, porque es a través de su súplica que Ella puede hacerlo todo. Porque puede obtener todo lo que pide de Nuestro Señor que es omnipotente, ella es Reina. Por tanto, el reinado de Nuestra Señora es el reinado de las súplicas que ella hace, del valor de las oraciones que ofrece.
La realeza de Nuestra Señora está íntimamente relacionada con el hecho de que ella es el canal de todas las gracias. Ella es Reina de todo porque a través de sus manos son concedidas todas las gracias que se dan a los hombres. Todas las peticiones que hacen los hombres se presentan a través de ella. Si todos los Santos y Ángeles del Cielo pidieran otra cosa y no pasaran por ella, no la obtendrían. ¡Solamente ella pidiendo, sin ninguno de ellos, obtiene ese favor! Por tanto, el foco de la predilección divina se concentra enteramente en ella. De ella parte a toda la Creación. Existe, por tanto, una especie de correlación íntima entre las dos realidades.
Por qué Dios quiso hacer milagros en Lourdes
La aparición de Lourdes a mediados del siglo XIX es la más famosa de una serie de otras, que culminan en Fátima en 1917 con la afirmación del Reino de María. En la densa oscuridad de nuestros días, la aparición de Lourdes es como una diana que anuncia que el Reino de María vendrá, constituye un toque de clarín del Reino de María.
Santa Bernadette de Lourdes, la vidente
En Francia, por ejemplo, existe un magnífico santuario de Paray-le-Monial, donde Nuestro Señor hizo las revelaciones de Su Sagrado Corazón a Santa Margarita María de Alacoque. Fácilmente podría haber hecho que se produjeran allí muchas curaciones y milagros, y también en otros santuarios a Él consagrados.
Sin embargo, Él quería que la mayor fuente de milagros de la Historia ocurriera en un lugar que estaría dedicado a Nuestra Señora. En otras palabras, Él deseaba que todas esas curaciones se obtuvieran sólo bajo la égida de Nuestra Señora, después de una aparición de Nuestra Señora, como una gracia de Nuestra Señora y mediante una petición hecha a Nuestra Señora. En otras palabras, Él quería que todas estas estupendas curas pasaran por sus manos.
¿Y por qué? Evidentemente, para documentar la verdad de fe de su Mediación Universal, para que los hombres comprendan hasta qué punto Ella puede lograrlo todo. Las peores enfermedades, los mayores males, los sufrimientos más horribles, ella los cura. Ella toma las leyes más inflexibles de la naturaleza y las rechaza. ¡Ella lo conquista todo! A través de ella, una persona sin nervio óptico ve...
Los baños de Lourdes donde Nuestra Señora obra innumerables milagros
Recuerdo una pequeña canción religiosa que se cantaba cuando yo era joven, cuando todavía había un resto de piedad en la sociedad, que decía: “¡Ave, oh Madre! Salve, oh Virgen Santísima, del universo portentoso y exquisito. Gloria más espléndida que la que tiene Tu único Dios, Señor del universo”. El canto es piadoso y la conclusión es sencilla: Nadie tiene gloria más espléndida que la Santísima Virgen excepto Dios, Señor del Universo.
Es decir, Nuestra Señora está infinitamente por debajo de Dios. Y todo lo que está debajo de Nuestra Señora está inmensamente debajo de Ella. Esto es lo que nos dicen las continuas curas de Lourdes.
Hay una cierta religiosidad volcada a pedir favores y gracias materiales, y que un tanto desdeña los favores espirituales. Estas almas quedan muy impresionadas por los favores materiales concedidos en Lourdes. Algunas personas no entienden que estos favores materiales que Dios da son, efectivamente, favores y que hay que pedirlos. Pero sólo son favores auténticos en la medida en que llevan al alma a desear favores espirituales, gracias para el alma. Aquí es donde Dios realmente atrae las almas hacia Él, porque todos los favores dados tienen este fin.
Los enfermos siguen acudiendo en gran número rezando por curas.
Digo esto porque recientemente tuvimos la bendición de las velas de San Blas. Vi esa masa de personas que van a la iglesia a recibir la bendición para protegerse de los dolores de garganta. Es claro que Nuestra Señora desea liberarnos del dolor de garganta en los casos en que esta dolencia no nos conduce a la salvación. Porque a veces un dolor de garganta, o una enfermedad aún peor, es muy bueno para un hombre. Si no hubiera enfermedades en la Tierra, el Infierno estaría mucho más lleno de lo que está; no sólo un poco más lleno, ¡sino mucho más lleno de lo que está! Por tanto, Nuestra Señora no cura todas las enfermedades.
Pero cuando cura, lo hace con placer y amor maternal. ¿Y por qué lo hace? Para que la gente sienta su bondad. Y estimular su deseo de curarse del mal, de las enfermedades del alma, y de adquirir sobre todo bienes espirituales.
Qué preguntar en la fiesta de Lourdes
Entonces, ¿qué debemos pedirle a Nuestra Señora de Lourdes en su fiesta que se acerca?
Dado que Nuestra Señora de Lourdes deseaba ser conocida allí, sugiero – y es sólo una sugerencia – que en vísperas de su fiesta, podamos pensar en una gran gracia para pedir a Nuestra Señora.
Debemos acudir a Nuestra Señora y pedir favores espirituales y temporales.
Esto nos lleva a una reflexión sobre nuestras vidas. Nos lleva a elevar un poco el panorama de nuestra vida espiritual y, de este modo, a tener una visión más precisa de nosotros mismos, de nuestras actividades, de nuestro camino de vida, y a decir una oración de gratitud a la Virgen.
En la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús en la ciudad de São Paulo hay una cueva con una imagen de Nuestra Señora de Lourdes lo cual es inusual porque, si no me equivoco, era la imagen que antes se veneraba en la gruta de Lourdes. la imagen actual se colocó allí. Tiene, por tanto, un vínculo más directo entre Lourdes y nosotros.
Por esta razón, en las últimas horas de la tarde, allí se da la bendición de los enfermos, y muchas personas han afirmado que allí fueron curados. No se han realizado investigaciones, pero se dice que estas curaciones se han producido.
En vista de esto, nunca debemos olvidar que las enfermedades del cuerpo son tratadas en los Evangelios como símbolos de las enfermedades del alma. Y así como algunos padecen parálisis del cuerpo, otros padecen parálisis del alma; algunos padecen ceguera del cuerpo, otros del alma; lo mismo con la sordera, el mutismo, etc.
Si tenemos defectos del alma que quisiéramos corregir, este sería el momento adecuado para llevarlos a los pies de Nuestra Señora y pedirle que nos sane. Es una petición muy razonable, porque si Nuestra Señora tiene un deseo tan grande de sanar nuestros cuerpos mortales perecederos, ¡cuánto más querrá sanar nuestras almas imperecederas e inmortales!
Nuestro Señor Jesucristo no vino a la tierra para salvar cuerpos; Él vino a la tierra para salvar almas y por eso no puede sino complacerse en recibir nuestras peticiones. Preguntamos por nosotros mismos o por alguien que nos importa, alguien con quien estamos haciendo apostolado, por un alma cuyas pruebas nos asustan, por un amigo cuyas aflicciones o tentaciones y peligros son motivo de preocupación para nosotros.
Entonces debemos ir ante Nuestra Señora de Lourdes y hacerle esta petición; ésta es la sugerencia que quisiera hacerles durante esta novena que precede a la Fiesta de Nuestra Señora de Lourdes.
Nuestra Señora Reina, Patio del Santuario de Lourdes
Santa Bernadette Soubirous - 16 de abril
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Los textos de los datos biográficos y los comentarios provienen de notas personales tomadas por Atila S. Guimarães de 1964 a 1995. Dado que la fuente es un cuaderno personal, es posible que a veces las notas biográficas transcritas aquí no sean rigurosas siga el texto original leído por el Prof. Plinio. Los comentarios también se han adaptado y traducido para el sitio de TIA.